martes, 27 de abril de 2010

Por sus actos les conoceréis

Últimamente se le está dando mucho bombo al asunto de la pederastia y las violaciones dentro del ámbito eclesiástico, cuando realmente y, como todos sabemos, no es nada nuevo.

El caso es que, leyendo ayer un artículo, pensé que me sorprendía muchísimo que la Iglesia, y especialmente el Papado, proteja y oculte a dichos personajes (personajes por no llamarles persona). Quiero decir, yo creo que estos curas que abusan de los niños y de la confianza depositada en ellos por sus padres y su comunidad no es que no sean buenos cristianos, es que directamente no creen en dios; porque ¿cómo una persona temerosa de Dios se atrevería a abusar del cuerpo de un infante? Cometiendo eso que tanto teme y odia la iglesia: HOMOSEXUALIDAD.

Y no sólo eso, en la biblia hay un estracto donde se condena explícitamente el maltrato y el abuso a los niños. Es decir, que no sólo cometen homosexualidad violando a pobres niños, sino que también se pasan la palabra de Dios por el forro de la sotana.

Y que encima tengan la caradura de negarlo todo, o incluso de culpar al pequeño. Lo último que se ha escuchado es que "internet tiene la culpa por la carga de erotismo que conlleva". Discúlpeme señor Obispo, pero en lo que llevo de día navegando por la red, todavía no he visto nada erótico. No lo ves si no quieres verlo.

No hay más ciego que el que no quiere ver, y si no que se lo digan a los miembros de la comunidad de los niños y niñas que han sido violentados que incluso se atreven a culparles a ellos.
Si la culpa es de los padres, que los visten como monaguillos. No te jiba.
Pero me gustaría ver su reacción si el niño o la niña en cuestión hubiese sido su hija, su nieta, su hermana o ella misma. "¿No te lo estarás inventando?" Sí, una niña de ocho años se inventa por diversión que el cura de su iglesia le ha tocado las braguitas.
Por dios, a qué mente enfermiza se le ocurre. Será la misma mente enfermiza que cuando violan a una mujer no la defienden porque llevaba minifalda e "iba provocando".

En resumen, que los mandamientos a los que los curas hacen caso omiso son: No cometerás actos impuros, no levantarás falsos testimonios y no consentirás pensamientos ni deseos impuros. El 5, el 8 y el 9.

Y, finalmente, sigo pensando que esa gente no es temerosa de Dios, porque no cree que Dios vaya a castigarle cuando muera. De verdad, y sólo para esos casos, me encantaría que existiera Dios para que Satán les pinchara los huevos en el infierno.


PD: Me ha salido menos satírico de lo que me esperaba, será que el latín me ha frito el cerebro.
PD2: Y que luego Ratzinger diga que el preservativo propaga el SIDA por África... manda cojones.

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