domingo, 22 de enero de 2012

En busca de nuestras Cutie Mark

Érase una vez, dos ponys que, habiendo llegado a adultos, todavía no tenían la Cutie Mark.Habían probado de todo, pero eran los únicos que, en sus respectivos pueblos, no la tenían.
Triste, More Alotofthings (como así se llamaba el chico) se fue a un pueblo lejano para ver si allí tenían una cura, y, el mismo Lunes que llegó allí, paseando por un jardín repleto de flores, se encontró una chica tumbada en el suelo, en una posición extraña. "¿Qué cojones está haciendo esta tarada?" Pensó. Ella parecía feliz.
-Hola, tienes unas pezuñas bonitas. -Le dijo- Me llamo Nep Nodesicion.

Cuál fue la sorpresa de More al ver que ella también tenía el flanco en blanco.


Los dos únicos ponys sin Cutie Mark, quedaron el Martes para ir a la biblioteca, para investigar si había habido más casos de ponys adultos sin la marca. Y, aunque al principio le había parecido una pony muy rara, Nep resultó ser una chica alegre, aunque entorpecía la investigación leyendo libros de cuentos en lugar de libros científicos.
Finalmente descubrieron que en unas ruinas cercanas, había un animal muy antiguo que podría ayudarles, así que decidieron ir al día siguiente.


Y así fue, el Miércoles pasaron todo el día caminando por el bosque hasta que, al anochecer, por fin lograron hallar las ruinas. Sin embargo, el animal antológico que esperaban hallar no era otro sino un dragón, que se enfureció cuando Nep le pisó la cola. Aunque eran mucho más pequeños que el dragón, More no se echó atrás, y puso a la pony a su espalda para protegerla. Sin embargo, el dragón no era agresivo, sólo se había despertado de mal humor. Les dijo que ellos ya sabían por qué no tenían la Cutie Mark, y que seguir buscando era inútil. Especialmente despertando dragones durmientes.

El jueves, malhumorado, acompañó a Nep a comprarse un helado, mientras pensaba en el dragón y lo que les había dicho.
-¿Sabes lo que creo? -Comentó Nep, mientras le pegaba un bocado a su heladito- Que no tengo Cutie Mark porque me gusta todo, y nunca consigo decidirme por nada.
-Yo creo que no tengo la Cutie Mark porque todo se me da bien, y todo podría ser mi especialidad.
-¿Te das cuenta de que podemos ser los ponys más especiales de todo el país?
-O una anomalía genética que no debe reproducirse.
-¿Reproduqué? ... ¿Vienes conmigo al baile de mañana?
Sin saber muy bien qué decir, More se vio finalmente envuelto en el baile del pueblo, el Viernes. A decir verdad, Nep estaba muy guapa, aunque se había puesto una capa un poco hortera para la ocasión.
-Me he peinado la cola como la de Rarity -dijo ella, radiante.
-¿La de quién?
Lo pasaron muy bien toda la noche, bailando y comiendo, hasta que More le dijo a Nep que al día siguiente se iba del pueblo para volver a casa, pues ya sabía el secreto de por qué no tenía su Cutie Mark. Nep se puso a llorar, porque no quería que el único pony que la comprendía, la dejara, y mucho menos antes del festival de la lluvia de estrellas.

El sábado, Nep se fue sola al festival de la lluvia de estrellas. More ni siquiera se había despedido de ella, y estaba muy triste. Tan triste estaba, que se quedó dormida antes de ver si quiera una estrella cayendo. More se había quedado en el pueblo al fin, y se acercó despacio para darle una sorpresa. Sin embargo, al ver que estaba dormida, decidió no despertarla. Estaba en una postura muy rara, la misma que le había visto la primera vez que se encontró con ella.
-Así que estaba durmiendo -murmuró-... ¿durmiendo en un jardín?

Cuando por fin despertó, Nep le abrazó con alegría, y él le dijo que no podía dejarla un día antes de Nightmare Night, su fiesta favorita.

Así que el domingo, More y Nep prepararon sus disfraces de cowgirl y de demonio, respectivamente, y se marcharon juntos y felices a celebrar la Nightmare Night, luciendo con orgullo sus flancos en blanco.


FIN

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